LO GRANDE.
Por grande debía ser evidente más no, resulta que todos buscamos hacer algo grande en la vida y no encontramos o el que o el momento o sencillamente paso o no tengo ganas. Pero lo grande es un referente.
De pequeños todos decimos:»Yo cuando sea grandre…».
«Lo grande»se ha convertido en una referencia de crecimiento y éxito personal y profesional.
Más casa, más coche, más títulos, más sueldo, más dinero, más amor, más feliz…todo más grande.
Si nos comparamos con el mismo Universo nos podemos percatar de nuestra total y absoluta pequeñez, nos basta la tierra, nos basta el país, la nación, la provincia, el pueblo…en fin, tomemos la referencia que tomemos, nos damos cuenta de nuestra pequeñez en relación con todo.
Más SOMOS GRANDES, muy grandes en una sola cosa y que nadie nos puede superar. Somos grandes en EL AMOR. El Amor por el que fuimos hechos, del que estamos hechos y el que podemos dar es un poder tan grande que supera cualquier dimensión de análisis humano. Es ilimitado.
Quien ha amado, quien son ejemplos en la historia por su inmenso amor, trascienden las barreras del tiempo y el espacio.
Y ahí somos todos iguales. Pero nuestra mente atrapa nuestro poder de amar y lo encierra en un minúsculo y raquítico mundo que se llama «ego» bajo la forma de gobierno del «egoismo» que supone dar importancia a lo que no la tiene y creernos el centro y algo muy grande. Y esta grandeza egoica es la que deseamos, perseguimos y anhelamos.
La consciencia nos permite diferenciar «LO GRANDE» de «lo grande».
De manera consciente aprenderemos a ver lo grande que somos, lo inmensamente poderosos que somos si nos dejamos guiar por el AMOR.